Richard K. Morgan, con su novela Carbono alterado (Altered Carbon, 2002), nos lanza de cabeza a un universo oscuro, vertiginoso y profundamente filosófico, donde la identidad, la conciencia y la muerte han sido reconfiguradas por la tecnología. Esta primera entrega de la trilogía protagonizada por Takeshi Kovacs no solo revitaliza el género cyberpunk, sino que también lo expande, integrando elementos de novela negra, ciencia ficción hard y una crudeza que sacude.
En el siglo XXV, la humanidad ha colonizado otros mundos y ha perfeccionado una tecnología llamada “almacenamiento cortical” (stack), que permite digitalizar la conciencia y transferirla a distintos cuerpos físicos, conocidos como “fundas”. La muerte física ha dejado de ser definitiva, al menos para los ricos.Takeshi Kovacs, un exsoldado de las CCT (Cuerpos de Combate de élite) con un pasado traumático y un código moral ambiguo, es despertado de su prisión digital por Laurens Bancroft, un millonario que ha sido asesinado… aparentemente por sí mismo. Bancroft contrata a Kovacs para resolver su propia muerte, que no recuerda, ya que su copia de respaldo fue hecha antes del supuesto suicidio. La trama se convierte en una espiral de corrupción, violencia y cuestionamientos existenciales.
Morgan escribe con un estilo denso, detallado y cínico. El tono es agresivo, pesimista, incluso nihilista en ocasiones, lo que encaja perfectamente con el mundo hipertecnologizado y deshumanizado que presenta. La influencia del noir es evidente en la narración en primera persona, el antihéroe atormentado y las mujeres enigmáticas, pero todo ello transpuesto a un entorno futurista que recuerda tanto a Blade Runner como a Ghost in the Shell.
Uno de los aspectos más interesantes de la novela es cómo Morgan reflexiona sobre la conciencia y el cuerpo. Si puedes cambiar de cuerpo, ¿quién eres realmente? ¿Qué define tu identidad: tu mente, tu historia, tus actos? ¿Sigue existiendo la moral en un mundo donde el cuerpo es prescindible y la muerte es una molestia para los ricos?También hay una fuerte crítica al capitalismo extremo. Solo los millonarios pueden “vivir” eternamente, mientras los pobres venden sus cuerpos o son relegados a fundas degradadas. La desigualdad se convierte en un asunto literal de vida y muerte (o vida y resurrección).
Takeshi Kovacs es un protagonista áspero, violento, pero no plano. Está marcado por su pasado militar, por sus pérdidas, y por una desconfianza estructural hacia las instituciones. A su alrededor se teje una galería de personajes ambiguos, corruptos o rotos. Nadie es realmente bueno en este mundo, lo que refuerza la sensación de decadencia moral.
Carbono alterado es una novela exigente, a veces excesivamente violenta o densa, pero también profundamente estimulante. No es solo una historia de acción futurista: es una crítica feroz a la sociedad, una exploración de la conciencia humana y una actualización del hardboiled al siglo XXV.Puede que no sea para todos: la crudeza, las escenas sexuales y la complejidad del mundo pueden alienar a algunos lectores. Pero quienes disfruten del cyberpunk con carga filosófica y un ritmo implacable encontrarán aquí una lectura memorable.
Puntuación: ★★★★☆ (4.5/5)
Enlace de compra a Amazon: https://amzn.to/3HHKyHp